miércoles, abril 01, 2009


Como olvidar aquel día en el cual emprendimos ese tan esperado viaje juntos Aún recuerdo tu mano tendida, llamandome, prometiendome volar y tocar el cielo. Yo estaba rodeado de pantanos y gnomos maldiciendo, pero de ese mismo moribundo paisaje, y mas precisamente de una flor de loto, naciste vos..


Tocar tu mano produjo una sensación electrizante, que saqué de la valija de las sensaciones olvidadas. Nos despegamos del suelo y nos elevamos hacia la presunta eternidad.


Y volamos alto. Vimos los glaciares y los desiertos, las ciudades y el campo, el oceano y la montaña, sueños rotos y alegrías azucaradas, todo a la vez, todo en uno, como vos, como yo...


No nos detenía ni la lluvia, ni la filosa nieve, ni el mas hirviente de los soles; pues yo seguía de tu mano... El mundo era el edén, el cielo era mas azul que nunca, y hasta escuchaba los secretos que las estrellas se contaban entre si, complices e ingenuas, pensando que nunca nadie iba a oirlas; pero nosotros estabamos ahí, juntos, espiandolas..


Pero un día como cualquier día, sin avisos ni advertencias, me soltaste la mano. Y empecé a caer y a caer. Me sumergí en la peor y mas larga de las caídas. Ya no veía los glaciares y desiertos, ni las ciudades y el campo; mis ojos eran atacados por el viento turbulento (y esa era mi mejor excusa para ocultar mis lágrimas). El descenso siguió y siguió, a tal punto de perderme, y eliminar mi nocion temporal...









Aquel viaje hoy es solo un agridulce recuerdo, que apuñala en las noches mas solitarias. La caída terminó, sufrí el peor de los golpes cuando choque contra la tierra. Sin embargo, las noches de lunas esplendidas, rebozantes en el cielo, puedo sentir que empiezo a caer de nuevo. Percibo el viento pegandome en la cara, impidiendome abrir los ojos, y verte como un punto lejano alla arriba, sin poder distinguir si sonreis, si lloras, si me llamás, si me olvidás...

1 visiones:

Luz Clara. dijo...

como me gusta lo que escribis pichi.. me haces llorar en muchas oportunidades